jueves, 22 de abril de 2010

Similitudes y lecciones para aprender de la experiencia japonesa


Al fin de la década de los ochenta la ascensión económica del Japón parecía imparable. El valor de los inmuebles tampoco parecía tener límite y muchos especulaban con el momento en que el Japón tomaría el relevo de los Estados Unidos como líder de la economía global. Sin embargo, el Japón era a punto de entrar en sus décadas de pérdida.

¿Cuál fue la causa de la debilidad de la demanda interna y del largo periodo deflacionista? Una primera respuesta se encontraría en la combinación de dos elementos que forman parte de la misma idiosincrasia o manera de ser del Japón, que son una demografía estancada con tendencia al envejecimiento y una cultura que tiende al exceso de ahorro.

Sin embargo, la hipótesis de los factores idiosincraticos es bastante incompleta. La causa principal de la «década perdida» estuvo en la manera cómo se gestionó la enorme burbuja financiera e inmobiliaria. Está en este punto, aunque esté en diferente grado, donde existe el riesgo de similitudes con la crisis de crédito originada en el mercado hipotecario norteamericano. Desde un máximo de diciembre de 1988, cuando la capitalización de la bolsa japonesa llegó a un increíble 51% del total mundial, empezó un largo periodo de bajadas que, justamente debe años más tarde, la dejaría en un 11%. El índice Nikkei 225 tocó techo en diciembre de 1989 con casi 40.000 puntos; menos de tres años después, en agosto de 1992, no superaba los 15.000. En el 2003, llegó a bajar de los 7.500.

Todavía fueron más espectaculares las pérdidas en el sector inmobiliario. Los precios, simplemente, se hundieron después de un alza que había sido espectacular. Entre el comienzo de 1991 y el segundo trimestre de 2005 el precio del suelo en el conjunto de las seis principales ciudades cayó un 75,9% y, en la propiedad comercial, los retrocesos llegaron al 86,9%. En el conjunto del país, los descensos fueron un poco menos drásticos, pero eso no fue ningún consuelo porque, en el 2006, la pérdida llegó al 55,9% del valor que se había conseguido en 1991.

Estos descensos en el valor de los activos tuvieron importantes efectos en los balances contables de los que poseían en abundancia: empresas y bancos. Las empresas japonesas, por medio de un sistema de estrechas relaciones con los bancos que daba lugar a bajas delgadas de riesgo, habían tenido tradicionalmente unos altos niveles de endeudamiento para afrontar una fuerte inversión. Con la pérdida de valor de los activos, los ratios de endeudamiento se dispararon hasta niveles extremos, dejando en muchos casos el valor neto contable, el valor de los activos menos el de las deudas, en negativo.

La liquidación de las deudas ltrajo un raudal de ventas de activos. La escasez de inversiones y el exceso de ahorro llevaron al país a una situación de deflación. El Banco Central del Japón aumentó la masa monetaria y los tipos de interés nominales bajaron, pero el problema no se encontraba en la falta de liquidez sino en la falta de empresas dispuestas a coger créditos e invertir.

Las inyecciones de liquidez del Banco de Japón servían para recomponer el balance, pero no para conceder créditos y relanzar el crecimiento económico. El rompecabezas se acababa de complicar porque, con deflación, los bajos tipos de interés nominales se convertían en tipos reales relativamente altos, más elevados generalmente que en los Estados Unidos o en Europa, lo cual dejaba de incentivar definitivamente la inversión.

Sólo quedaba un camino por probar: forzar un aumento de la demanda agregada por medio del gasto público y del déficit público. El peor riesgo era generar inflación, pero en estas circunstancias la subida de los precios se habría considerado una bendición. Pero ni con eso. En pocos años, se sucedieron enormes déficits y la deuda pública escaló a tasas siderales con un resultado, en términos de crecimiento, decepcionante. Es como si los ciudadanos japoneses hubieran contrarrestado el mayor déficit de su gobierno con más ahorro privado, anticipando los futuros impuestos que acabarían sufragando los gastos públicos.


España: ¿Hay similitudes y lecciones para aprender de la experiencia japonesa?

"gestionar la enorme burbuja financiera e inmobiliaria", qué se tiene que gestionar de una burbuja?.
El problema de los políticos es que piensan que estas cosas se pueden gestionar o eso nos hacen pensar. De hecho aquí, ni en los EEUU, nadie ha querido parar la burbuja o exceso de demasiada monetaria. Eso responde a unos intereses vende determinados, la gente que controla los bancos centrales, principales impulsor de los excesos, sueño ricos, viven de las rentas del capital, no de las rentas del trabajo, y por lo tanto la política de hacer subir el valor de los activos, tanto de la Bolsa como del Mercado Inmobiliario, los hace más ricos, y por lo tanto los conviene. A la gente normal no le conviene estar pagando un piso de 70 metros cuadrados 50 años, esta gente está de espaldas a la gente normal en la clase trabajadora. Además de todo eso, la inflación de activos también se traspasa a los productos de consumo, cuando el mercado inmobiliario sube, también lo hacen los alquileres de las tiendas, por lo tanto tienen que traspasar este incremento de precios o trabajar con menos margen con el riesgo de quiebra que comporta. Eso explicaría la enorme inflación que varamos tener todos los países de la eurozona cuando varamos adoptar el euro. De los dos pilares de la política monetaria del BCE el primero establece que la M3 no tiene que crecer por encima del 4.5% anual, cosa que no ha pasado nunca. El crecimiento de la masa monetaria provoca inflación y la inflación separa las rentas, lo que cobra rentas se hace más rico y el que paga las rentas se hace pobre.
El caso de Japón a los años 80 es muy claro y sin embargo se ha estado repitiendo la experiencia, pero claro, los banco tienen un banco central o estado que los ayuda a diferencia de los negocios normales. El Banco Central es la cartelitzación del monopolio.
Las burbujas no se desinflan poco a poco revientan, de aquí el simbolismo de la burbuja. En tres años los precios de las viviendas en Japón se cayó más de un 50%, por lo tanto los banco tenían uno préstamos que no estaban apoyados por el activo, ya que el activo había bajado un 50%. El precio del activo baja tanto buen punto baja la cantidad de dinero que se está asomando en aquel mercado, hay clarísima correlación entre los préstamos hipotecarios y el precio de la vivienda. Tan pronto como los precios de las viviendas dejan de subir y los hipotecados tienen problemas para pagar las deudas, los bancos cierran el grifo de los préstamos y por lo tanto los precios de los activos colapsan, no se caen suavemente. Es una historia que se repite, porque no es la primera burbuja que hay a la historia.
Después del desastre el gobierno y el banco central han sido ayudando en los bancos, se han promovido fusiones entre ellos y encara sueño de los mayores del mundo, aunque su solvencia siempre ha estado en entredicho. Japón entró en 1990 con un 40% de déficit con respeto el PIB, ahora supera el 225%. Este déficit financiado por sus propios bancos con un rendimiento a 10 años poco superior al 1%, hace que no haya crédito a la economía real, la situación de los bancos no es lo bastante buena como para tomar riesgos y prefieren comprar deuda pública que dar préstamos. Sin que la I (inversión) suba no hay crecimiento, la I (inversión) determina las etapas de crecimiento o crisis. Y=C+I+G+XN. Sin que la I suba no habrá crecimiento y por lo tanto el problema se alarga y el problema es hace mayor. No quieren tomar la determinación de nacionalizar los bancos o parte de ellos y dejar de hacer déficits públicos anuales del 10%, el nivel de vida de la población se vería seriamente afectada y la población miraría a los políticos como culpables. Mientras tanto el problema se va hiende grande o irresoluble.
En España se ha optado por la "solución" japonesa o lo que es lo mismo no hacer nada. El Banco de España es culpable de no hacer nada cuando los préstamos hipotecario estaba subiendo al 25% cada año, aquello para cualquier persona con un poco de juicio era insostenible. Ahora promueve las fusiones de las cajas que están peor, cajas gestionadas por políticos aparcados en las cajas después de ocupar cargos políticos. No han hecho mala gestión.
Los gobierno o gobiernos respectivos no han hecho nada para disminuir la apreciación de las viviendas, ellos eran los primeros interesados con eso, ellos cobran y financian sus partidos a través de las comisiones que pagan a los promotores inmobiliarios a los ayuntamientos. Cuando más ganan los promotores más comisión para el partido.
Ahora no pueden decir que han hecho mala gestión y acusan a la "crisis internacional" de todas las culpas, hacen fusiones en las cajas que están mal, los ha dado un fondo el fondo de reestructuración bancario para que puedan sobrevivir. Mientras tanto las cajas cuandoya no tienen liquidez, venden activos, pisos de gente que no ha podido pagar la vivienda, eso hace que el precio baje y por lo tanto las pérdidas sean cada vez mayores. Como la situación la conocen los bancos y cajas de primera mano no hace falta que nadie se los explique, y por lo tanto no dan crédito ni por viviendas que no sean suyas, ni crédito en la economía real y por lo tanto la economía no crece y no se pueden absorber estos desequilibrios. Japón también ha tenido años de un flujo crecimiento que no han durado más de dos años y otro vez volvemos a la crisis o recesiónpor|para dos años más, así llevan desde 1990. Vamos por el camino de ellos.

martes, 20 de abril de 2010

MANIFIESTO: "POR UNA VUELTA AL SENTIDO COMÚN EN LA ENSEÑANZA"



http://spes.org.es/index.php?module=noticias&func=display&sid=5


Adhiérete al manifiesto

Bilderberg

Hola, como saben no estamos solos y siempre ha sido sospechoso que se cambie de gobierno pero no de políticas, aunque todos veamos que son un desastre. El club Bilderberg y todo lo que comporta sería una explicación a esto, cambiamos de actor, pero el que realmente maneja los hilos no se deja ver.


http://www.elconfidencial.com/cache/2009/01/10/sociedad_82_bilderberg_manda_sobre.html

lunes, 19 de abril de 2010

BANCO SANTANDER

Aquí también se está formando una clara figura de vuelta. Mientras mantenga la directriz alcista, en azul discontínuo, todo está bien. Además va teniendo máximos crecientes y mínimos crecientes, la figura es claramente alcista. Si aguanta bien por esta zona, el próximo intento podría ser ir a los máximos de 12.

BBVA


Este gráfico a mejorado mucho y no comparto tus deseos de cerrar parcialmente la posición, cuando un valor se comporta bien y en las últimas semanas ha estado subiendo, lo ideal es aguantarlo. Tiene un soporte en la zona de los 10.7 y otro en 10, 5. En caso de perforación de esos dos soportes, tenemos la directriz alcista de corto plazo, marcada en azul discontínuo. El gráfico ha mejorado mucho yo aguantaría posiciones.

TELEFÓNICA





El empuje ha sido muy fuerte y esto no es bueno, denota tendencia, pero si esto se arregla la semana que viene sólo habrá sido un susto. Me refiero a que si no tiene continuidad sólo será eso, un susto, si tiene continuidad y pierde los 17,3, por debajo de la directriz, es posible que se vaya a 17 o incluso 16,5, cosa que dudo, pero no es descartable. Globalmente sigo siendo alcista, esto sigue pareciendo una figura de vuelta